Hacía años que deseaba visitarla, pues mi profesor de arte e historia universal era un ferviente admirador del imperio austrohúngaro. Antes siquiera de estudiar a Franco todos sabíamos quién había sido Otto Leopold Von Bismark.
Así fué que nada mas llegar a la ciudad me hice con un mapa y su número de telefono y tras interrogarle preparé una ruta con los monumentos que había que visitar. Levanté a mis amigos a las 9 de la mañana y cuando llegamos al teatro, antes de encaminarnos hacia la ópera descansamos en una sombra del maravilloso Volksgarden.
Habíamos desayunado por el camino, pero los 26 grados y el olor de las flores acabaron por abrirnos el apetito.
-Chicos, viena tiene fama de caro, yo no quiero gastar dinero en comer- dije.
-Pero yo quiero comer sentado! Un buen filete con patatas o algo!
-Javier, no sabemos cuanto puede costarnos aquí un escalope... Escalope...
ESCALOPE!
Entonces recordé el plato del que me había hablado mi profesor: el Wiener Schintzel.
Origen:
El origen de este plato data de Bizancio y se dice que los comerciantes árabes llevaron la receta a España e Italia durante la edad media. En la Venecia del siglo XV se mostraba la riqueza poniendo pan de oro sobre la comida, pero cuando el consejo de la ciudad lo prohibió se sustituyó por pan rallado.
La receta de este plato apareció hacia el siglo XVI. Otros dicen que fue introducida por el Mariscal de campo Radezky en 1857 cuando venció a los rebeldes en Milán y tomó como botín la receta de la cotoletta llevándola a Austria y convirtiendola en la identidad de este país tomando el nombre de Wiener Schinztel.
La cocina Austriaca tiene influencias de la republica checa, de Hungría y hasta de Italia. Por eso en todos estos paises encontramos estas variantes de lo que en España conocemos como "Escalope con patatas"
Ellos lo acompañan con ensalada de patatas, ensalada normal y a veces mermelada de arándanos. Su version original es en ternera pero hace tiempo que tambien los cocinan de cerdo.
Dónde comerlo:
Cuando andábamos por la Opera nos pusimos a buscar un sitio donde comer, y despues de informarnos encontramos un restaurante llamado ZUM BETTELSTUDENT. allí se puede comer mucho, muy bien y a muy buen precio. El filete en cuestion nos costó solo 10 euros y además nos invitaron a una cerveza al entrar! Ya sea para esta o cualquier otra comida austriaca os recomiendo este lugar. Que aproveche!!
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